El Rorschach es un test compuesto por 10 manchas de tinta, en las que la persona debe decir a qué se le parece. Al ser abstractas, las respuestas que se dan a cada lámina se convierten en una proyección de lo que el sujeto es en su propia realidad interior.

Para su corrección se tienen en cuenta diferentes aspectos:

 

1.      Qué ve.

Por ejemplo, en la lámina 5, lo más habitual es dar las siguientes respuestas: “un murciélago”,” una mariposa” o “un insecto”.

 

 

O en la lámina 8, lo más habitual es ver “animales cuadrúpedos trepando” (en la parte rosa lateral).

 

 

Esto es lo que se categoriza como respuestas vulgares, consideradas como normalizadas, que nos hablan del contacto con la realidad que mantiene la persona que evaluamos.

 

Sin embargo, si la persona ve algo que no se asemeja en absoluto a la forma que le presentamos, imaginemos que nos responde: “un tractor con remolque”, podría ser una señal de delirio, alucinación o deterioro cognitivo.

 

2.      Cómo lo ve.

Lo más frecuente es que nuestra percepción vaya de los genérico a los detalles, es decir, que primero se vea sea la totalidad de la lámina o los detalles grandes de ella. Por ejemplo, en esta lámina una respuesta habitual sería: “dos personas tocando un tambor”, o “un lazo rojo”. Sin embargo si la persona ve detalles pequeños y es en lo que se fija para emitir sus respuestas, supongamos “los dientes de un animal” (en la parte inferior central, en la zona del gris claro), podría tratarse de una persona sumamente obsesiva y minuciosa.

3.      El contenido de lo que ve.

Podemos responder con diferentes categorías: personas, animales, objetos, zonas geográficas, etc. Cada respuesta tiene una significación simbólica que nos aporta información de la personalidad. Por ejemplo, cuando aparecen reiteradas veces respuestas de tipo “máscaras”, “ojos que miran”, se interpretan como síntomas de paranoia, ideas persecutorias o personalidades suspicaces.

También podemos encontrarnos con respuestas de contenido anatómico, como puede ser “unos pulmones” (en la parte gris superior) o “los ovarios” (en la parte rosa central), significativos de personas hipocondríacas.

Así como un exceso de alusiones a prendas de vestir, como podría ser: “zapatos”, “botas de montaña”  (parte inferior) podría ser indicativo de personalidades narcisistas.

4.      En qué se fija

Lo habitual es interpretar la figura de lo que vemos y no el fondo. Por ejemplo en esta lámina, una respuesta habitual sería: dos encapuchados chocando las manos. Sin embargo si la persona lo que interpreta es el contenido en blanco, y dice: “una nave espacial despegando” (refiriéndose a la parte central blanca de la lámina) puede ser síntoma de una agresividad reprimida.

5.      Matices cualitativos

Cada lámina se relaciona con un aspecto simbólico de la persona. Esta lámina en concreto, refleja la relación materna. Una respuesta de tipo “dos mujeres mirándose” (en la parte superior) podría entenderse como una relación afectiva adecuada, mientras que respuestas del tipo “dos caras maléficas mirando hacia los lados” (parte central), puede ser indicativo de una relación conflictiva.

Psicóloga en Cáceres  y Salamanca. Aurora Gardeta.