Síntomas de la angustia

Caracterizada por sentimientos de aprehensión o miedos, preocupaciones excesivas y acompañadas, según los casos de: irritabilidad, inquietud, impaciencia, dificultad para concentrarse, fatiga, tensión muscular, dificultad en conciliar el sueño, mareo, taquicardias, etc.

Causas de la angustia

Las sensaciones de agobio y crisis de angustia pueden aparecer por múltiples razones. Entre las más frecuentes están el estrés, como una reacción emocional a un exceso de carga laboral o grandes dosis de autoexigencia; en las FOBIAS pueden aparecer por encontrarse en lugares cerrados o donde hay mucha gente (claustrofobia o agorafobia) , en momentos en los que uno siente que podría perder el control sobre sus sensaciones o temer los peligros que conllevan los síntomas físicos como sucede en los ataques de pánico, o por preocupaciones excesivas sobre cuestiones cotidianas del tipo: que un ser querido pueda tener un accidente de tráfico, que tenga un conflicto con un familiar, que no llegue a final de mes, etc., que aparecen en el trastorno de ansiedad generalizada.

Tratamiento de los problemas relacionados con la angustia

Dependiendo del tipo de síntomas,los tratamientos irán enfocados a trabajar los pensamientos anticipatorios, extinguir los comportamientos de comprobación o evitación, estrategias de afrontamiento progresivo al estímulo ansiógeno, distracción cognitiva o la gestión emocional de las situaciones estresantes. La mayoría de las veces se acompaña también de una reestructuración de esquemas de pensamiento sustentados en creencias irracionales que provocan la aparición de la ansiedad.